Siento al todo y siento a la nada, todo en uno sólo, que en mi es.
Alguien una vez me dijo que si al llorar la primer lágrima sale de tu ojo derecho, lloras de alegría, si sale del izquierdo, es de tristeza. Esta vez salieron dos, una en cada ojo, en sincronía perfecta.
Tenía razón, me siento feliz y melancólica.
Mi casa me cobija y me descubre al mismo tiempo. Es como si me dijera "Te amo, te amo tanto que dejo mi puerta abierta para cuando necesites de mi, pero tú y yo sabemos que hoy tu lugar es otro."
Me siento como un pájarito aprendiendo a volar, aunque a veces doy unos pasitos para atrás, y aunque a veces ver hacia abajo me vuelve a dar miedo, saltaré una vez más.
El aire me ayuda pero soy yo quién las alas lleva puestas, y lo que es mio, nadie me lo quita...
asi que volaré lo más alto que pueda volar, para ver lo más que pueda; mis alas no se cansarán porque mi corazón lleno está, llevo al amor y a la verdad en el.
Siento al todo y a la nada, es tanto que las palabras me faltan.
Hasta la Victoria Infinita...
Karen .
dic 29, 2010.
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